Las Constelaciones Familiares (también conocidas como Configuraciones Familiares) son una potente herramienta terapéutica. Su objetivo es ayudarte a liberarte de miedos, carencias, destinos difíciles, traumas, enfermedades y relaciones problemáticas que experimentas en el presente. Aunque estas dificultades se manifiestan hoy, su origen real está en la repetición de conflictos, comportamientos y eventos de tu historia familiar.
Esta terapia es de naturaleza fenomenológica, lo que significa que fluye y trabaja con lo que se manifiesta en el momento, permitiendo que la verdad emerja por sí misma. El término “Constelaciones Familiares” proviene de una traducción del alemán; la interpretación más precisa es “Configuración Familiar”.

¿Cómo funcionan?
Nuestro cuerpo actúa como una “antena” que nos permite percibir y observar la configuración de nuestro sistema familiar. A través de este proceso, podemos descubrir a quién estamos siendo leales inconscientemente, con quién tenemos implicaciones profundas y cuál es nuestro verdadero lugar dentro del orden familiar.
Utilizando representantes, podemos visualizar dónde estamos situados en ese sistema. Como dijo Bert Hellinger, el creador de este método: “Usted está aquí”, refiriéndose a la claridad que se obtiene al observar.

La Ciencia detrás de las Constelaciones

Cuando Bert Hellinger comenzó con las constelaciones hace 40 años, solía decir: “No sé por qué funciona, pero funciona”. Hoy, gracias a los avances en la física cuántica, entendemos el mecanismo detrás de su efectividad.
Nuestro cuerpo posee una red tachyónica que permite que la energía circule a 27 veces la velocidad de la luz. Sabiendo que al superar la velocidad de la luz el tiempo se vuelve relativo, podemos comunicarnos a través de nuestro cuerpo con nuestros ancestros. Esto nos permite integrar, observar e incluir, con una nueva conciencia en el presente, aquello que fue muy difícil en el pasado. Así logramos “reubicarnos” en el lugar que realmente nos corresponde para poder vivir plenamente nuestra propia vida. En correspondencia a los “Ordenes del Amor”.

Potenciando el proceso con Tachyones

Al utilizar la energía de los tachyones, logramos que esa red tachyonaria de nuestro cuerpo se limpie, se ordene y se potencie. Esto hace que las constelaciones sean aún más profundas y sanadoras, facilitando una transformación más efectiva.